Conseguir que las piscinas se adapten e integren en entornos urbanos o rurales, y puede ser un quebradero de cabeza a la hora de realizar un proyecto, hoy hablaremos de la piedra de Osona, gran descubrimiento para facilitarnos esta labor.
Los materiales de construcción han sido perfeccionados para garantizan una larga vida a las piscinas de obra y los mejores acabados.
Conseguir acabados verdes o aguamarinas es una tarea complica y costosa, debido a las complicaciones de conseguir un gresite de este color, este objetivo se consigue de forma sencilla gracias a la piedra de Osona.
Esto ocurre especialmente en las piscinas de la Serra de Tramuntana en Mallorca, siempre intentando respetar la continuidad del paisaje por ley deben ser verdes.
La mejor solución para darles ese tono fresco tan agradable, es esta piedra de tonalidad aguamarina y de gran formato.